La buena comunicación y la camaradería son dos aspectos muy positivos en el ambiente laboral. La facilidad de habla e interacción entre compañeros resulta en un claro beneficio para el ambiente laboral en general.
Los problemas surgen cuando, debido a la confianza y familiaridad, no se respetan los momentos de concentración del otro, lo que resulta en un robo de tiempo. No solo es un problema la distracción en sí, sino que se ha demostrado que volver a concentrarse y enfocarse debidamente en la tarea, luego de interrumpirla en un momento importante, puede tomar su tiempo.
De hecho, investigadores de la Universidad de California concluyeron, después de una cuidadosa observación, que el trabajador de oficina típico es interrumpido, o cambia de tarea, en promedio, cada tres minutos y cinco segundos. Y lo más sorprendente es que, luego de estas interrupciones, le puede llevar hasta 23 minutos tan solo volver al punto de enfoque en el que se detuvo.
Tomando en cuenta que, cuando un compañero te pide un minuto de tu tiempo, ambos saben que realmente no es un minuto, sino considerablemente más; y sumando el tiempo que te tomará volver a concentrarte al nivel al que estabas, lo mejor es pensarlo dos veces antes de causar interrupciones, y más cuando son demasiado largas.
Una buena idea para evitar interrupciones en los momentos menos oportunos puede ser pautar algunos lineamientos en cuanto a las interrupciones en la oficina. Podrían fijarse momentos específicos del día en el que se “permiten” distracciones.
Si esto te parece otra distracción incómoda te aseguramos que no tiene que serlo, ya que puede ajustarse a tu momento de descanso. Y, si no tomas momentos de descanso, déjanos compartirte que, según un estudio realizado por el Grupo Draugiem, los trabajadores más productivos trabajan concentrados por un promedio de 52 minutos, seguidos de 17 minutos de descanso.
Cualquiera sea la forma que se tome en tu oficina para evitar robar el tiempo de los demás compañeros, es importante que, individualmente, tomemos consciencia y demos la importancia que tiene al tiempo de los demás. Esto demostrará que respetamos y valoramos su trabajo, por lo que seguramente estarán más inclinados a ayudar en el futuro.
