El mercado laboral – profesional actual es distinto al de hace algunos años. De hecho, se dice que continúa cambiando cada día y que esta tendencia seguirá a lo largo de los años futuros.
Como resultado, constantemente hay que ajustar nuestras hojas de vida para estar actualizados a lo que el mercado necesita.
Ahora bien, no existe una fórmula mágica para escribir el currículum vitae perfecto. Sin embargo, si hay ciertas habilidades que deben obligatoriamente estar presentes para tener posibilidades de triunfar en el mercado laboral actual:
Proactividad
La proactividad es una habilidad que siempre tendrá vigencia dentro del mercado laboral – profesional. Hay que recordar que las empresas valoran positivamente a aquellos candidatos que demuestren iniciativa, independencia, autonomía y proactividad.
Un colaborador proactivo es garantía de ser un empleado inquieto, curioso, ávido de conocimiento y experiencia. Por ende, se convierten en un candidato que muy posiblemente desarrolle un gran compromiso y productividad con la empresa.
Lo importante es reflejar esta productividad dentro de los valores, capacidades y actitudes dentro del currículum. Pero también, hay que asegurarse de demostrar esta proactividad.
¿Cómo? Durante la entrevista, hacer preguntas referentes al cargo al cual se postula, también referentes a la empresa, su historia y visión a futuro, o también las inherentes a la posibilidad de crecer dentro de la empresa.
Trabajo en equipo
Es prácticamente imposible que alguna empresa logre sus objetivos si sus colaboradores trabajan individualmente. Si bien es cierto, cada quien debe estar enfocado en sus labores, el trabajo en equipo es fundamental para alcanzar las metas de la organización.
Por esa razón es importante dejar claro la plena disposición de trabajar en equipo en el currículum vitae. Demostrar que se puede ser parte de un equipo y de que hay capacidad de integrarse a distintos grupos.
También es clave demostrar que se puede asumir roles y delegar tareas dentro de los equipos de trabajo. Por último, es fundamental reflejar que hay capacidad de desarrollar liderazgo de equipo y de formar otros líderes cuando sea necesario.
Liderazgo
Este punto se conecta con el anterior. Además de formar parte dentro de la habilidad de trabajar en equipo y ser líder dentro de los mismos, es fundamental que el liderazgo en sí sea una habilidad que resalte dentro del currículum.
No importa si el cargo a postularse suponga el manejo de equipos de trabajo o la dirección de un departamento de la empresa. Es vital demostrar que dentro del candidato hay un espíritu de líder nato.
Las empresas valoran mucho a los colaboradores capaces de ser líderes. El motivo, es que tarde o temprano alguien debe asumir el liderazgo y con esto, contribuir a que la empresa alcance sus objetivos de negocio.
Hay que recordar que un líder es capaz no solamente de conducir a la empresa hacia la dirección correcta. También tendrá la capacidad de motivar al resto del equipo de colaboradores y en conjunto trabajar en función de sus propias metas personales y las de la empresa.
Dominio de idiomas extranjeros
Si hay algo que refleja el espíritu del mercado laboral – profesional actual es su carácter global. Por ende, un segundo o hasta tercer idioma siempre será bien visto por empresas y sus reclutadores.
Por supuesto, el inglés encabeza la lista de los idiomas más solicitados. No obstante, también son valorados el alemán, chino, italiano, portugués o francés.
Dominar uno o varios de estos idiomas representa una ventaja competitiva. Lo importante es, al igual que las otras habilidades, demostrar que se tiene el dominio del idioma.
Es decir, asegurarse de dominarlo antes de colocarlo en el currículum. Así, el día de la entrevista, si hacen preguntas en ese idioma, el candidato podrá responder con fluidez y claridad.
Cursos de formación o especialización de otras áreas
Evidentemente los títulos profesionales son fundamentales. Pero, si esta formación académica es complementada por cursos, especializaciones o programas de otras áreas, las posibilidades de ser contratado aumentan.
Estos cursos pueden ajustarse a la carrera principal. Sin embargo, también pueden ser relacionadas indirectamente al título de pregrado.
Por ejemplo, un abogado tendrá como título principal su licenciatura en leyes. Pero también podría formarse en el área de marketing jurídico y con esto complementar su formación de abogado.
Incluso, alguien que tenga un título en diseño gráfico, pero tiene una pasión por la repostería y esto lo podría reflejar en su currículum.
Directa o indirectamente, cualquier formación complementaria está muy bien valorada hoy en día. Por un lado, demuestran que el candidato tiene interés y capacidad de aprender de otras áreas y por otro, reflejan el valor de la disciplina, compromiso y pasión por desarrollar todo tipo de habilidades.
En definitiva, estas habilidades no aseguran que una persona conseguirá el empleo de sus sueños. Sin embargo, indudablemente lo pondrá en ventaja frente a otros candidatos y le brindará altas posibilidades de ser contratado en cualquier empresa.
